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Ingredientes: 275 g de pasta (nosotros hemos utilizado
farfalle –lacitos–); ¼ kg de champiñones laminados; 200 g de bacón; ¼ l de nata
líquida; ½ cebolla pequeña; 2 dientes de ajo; un poco de orégano; aceite de oliva,
y sal.
- Preparación: Ponemos en una sartén un poco de aceite de
oliva para freír la cebolla y los dientes de ajo muy picaditos, esperando a que
estén sancochados para añadirles el bacón, rehogar y agregar los champiñones,
dejando hacer hasta que estén listos, añadiendo la nata y esperando a que
comience a hervir para retirar. Por otro lado, ponemos agua a calentar con un
poco de sal, aceite de oliva y orégano; cuando está hirviendo, añadimos la
pasta y esperamos alrededor de 10 min para que esté “al dente” (usted decide el
tiempo a su gusto). Escurrimos la pasta con un poco de agua fría, la ponemos sobre los platos, colocamos encima el preparado caliente y lista.
Algunas curiosidades sobre el ajo:
Ajo (Allium sativum).
Planta de la familia de las Liliáceas, aunque hoy se tiende a incluirla entre
las Aliáceas, de 30 a
40 cm de
altura, con hojas ensiformes muy estrechas y bohordo con flores pequeñas y
blancas. El bulbo es también blanco, redondo y de olor fuerte y se usa mucho
como condimento. Existen diversos tipos:
blanco, rosado, etc. Aunque posee un origen incierto, se le considera oriundo
de Asia,
desde donde se extendió a toda Europa
y, desde aquí, hacia América a través de los conquistadores españoles. En Egipto era consumido
por los esclavos que trabajaban en la construcción de las pirámides, ya que se
le atribuían propiedades fortificantes y vigorizadoras. Durante los tiempos de
la Grecia y Roma antiguas era consumido principalmente por soldados, navegantes y campesinos.
Los gladiadores
eran muy aficionados a su consumo por las propiedades excitantes de la libido
que se le atribuían. En la Edad Media ya se le usaba con fines terapéuticos, generalmente para combatir enfermedades bacgterianas. El término ajo procede del latín alĭum.
En gastronomía tiene un protagonismo
estelar al ser aderezo indispensable de muchos platos, pudiendo utilizarse en
forma de cabezas, dientes del bulbo o laminados. Actualmente, el ajo es muy
utilizado en la medicina naturista, teniendo una amplia utilización
farmacológica. Es eficaz como antibiótico,
combatiendo numerosos hongos, bacterias y virus;
en el control de enfermedades cardíacas, ya que reduce el bloqueo de las arterias
y aminora la presión arterial y el colesterol;
incrementa el nivel de insulina en el cuerpo; controla los daños causados por la arteriosclerosis y el reuma.
También se lo relaciona con la prevención de ciertos tipos de cáncer
y en la reversión del estrés y la depresión.
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